Hola! Se que muchos se preguntaran: ¿Una pizza hecha sin horno? y les respondo si, es una técnica que podemos utilizar tanto en casa como en la cocina de nuestro restaurante, y es muy fácil y rápida, solo necesitamos una sartén antiadherente, su tapa y la creatividad para que nos quede deliciosa.
Acompáñanos en esta fabulosa y diferente manera de preparar pizza.
INGREDIENTES: (para 6 personas)
2 tazas de harina de
trigo (280 gr)
½ taza de agua tibia
¼ cucharada sal
1 cucharada de azúcar
7 gr de Levadura
1 cucharada de aceite
Para la salsa y la cubierta:
1 lata de 500 gr de tomate pelado
1 cebolla pequeña
4 hojas de albahaca
fresca
1 diente de ajo picado
Aceite de oliva
Sal y pimienta recién
molida
400 gr de queso mozzarella
rallado
Orégano seco
Y los ingredientes que
desee agregarle a la pizza
PREPARACIÓN:
En un tazón profundo coloque el azúcar, la levadura y el agua tibia, removiendo
para diluir bien los ingredientes. Una vez diluidos añadimos la sal y el
aceite, nuevamente removemos bien para integrarlos. Tomamos una taza de la harina de trigo y la
añadimos dentro del tazón. Con la ayuda
de una cuchara, paleta de madera o silicón, mezclamos la harina con los ingredientes,
notaremos que comienza a formarse la masa, luego añadimos de a poco la segunda
taza de harina hasta que nos quede una masa que no se nos adhiera a las manos.
Con esta masa formamos una bola, y la colocamos en otro tazón untado de
aceite, y le colocamos un poco de aceite sobre la masa. Cubrimos el tazón con
un paño húmedo y dejamos reposar nuestra masa por alrededor de una hora, hasta
que doble el tamaño.
Aparte picamos la cebolla en cuadritos y la colocamos en una olla pequeña
con un poco de aceite de oliva previamente calentado, dejamos que se sofría
hasta transparentarse y añadimos el ajo picado, luego agregamos los tomates
previamente triturados. Rebanamos
algunas hojas de albahaca y las añadimos a la salsa junto con la sal y pimienta
recién molida al gusto, la dejamos cocinar aproximadamente 45 minutos a fuego
medio bajo. Una vez lista, le colocamos 1 cucharadita de orégano fresco,
rectificamos la sal, retiramos del fuego y reservamos.
Pasado el tiempo de reposo de la masa, tomamos la cantidad necesaria para
cubrir la sartén, con ayuda de un rodillo la extendemos sobre una superficie
plana que habremos enharinado antes de colocarla.
Ya extendida la masa, la colocamos sobre la sartén, a la que habremos
colocado un poco de aceite. Al colocar la masa sobre el sartén debe estar sobre
fuego bajo, así dejamos que se cocine la masa en la sartén por aproximadamente
10 minutos.
Pasados los 10 minutos volteamos la masa y agregamos salsa de tomate esparciéndola
por toda la superficie. Luego colocamos el queso mozzarella rallado por toda la
pizza, y los ingredientes que nos provoque añadirle (a mí en particular me
gusta con anchoas y aceitunas negras), colocamos la tapa a la sartén y dejamos
que se cocine por otros 10 minutos. Una vez lista la retiramos del fuego le
ponemos aceite de oliva, un poco más de orégano, servimos acompañada de una
copa de buen vino. ¡Y a disfrutar!
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